A la edad de nueve meses, el pediatra puede realizar pruebas en relación a la capacidad auditiva del bebé, el test de Boel.
A esta edad, el pediatra puede comprobar si el desarrollo del bebé es normal mediante este test, valora la reacción orientativa de la mirada a través de la estimulación acústica.
Si el bebé no supera el test, el pediatra lo derivará a una consulta con el otorrinolaringólogo. También en el caso de que padezca otitis de repetición.
En el último caso de que la otitis que padezca no sea infecciosa, no se debe descartar una posible consulta con un osteópata que se dedique a tratar a niños. Los resultados son muy buenos y sin medicamentos que casi siempre tienen alguna toxicidad.
En cuanto a su función digestiva, es posible que se produzcan alteraciones de manera continuada que excedan de lo normal. Por ejemplo, diarreas frecuentes o vómitos que se acompañen de alguna erupción de la piel. En éste caso podría ser que tenga alguna intolerancia o alergia alimentaría que debe controlar el especialista.