Aunque resulte increíble los niños con sordera pueden acceder a la lectura en voz alta encontrando beneficios a pesar de su discapacidad. Las técnicas para lograrlo van desde el lenguaje por señas hasta la pantomima (mímicas).
El mecanismo de enseñanza necesita ser distinto al dirigido para los niños sin esta limitación física. La cartilla fonética en estos casos no complementa del todo el aprendizaje del menor y necesita ser compensada con otros recursos
La lectura es estimulada a través de la lectura en voz alta, asimismo la escritura. El lenguaje en su conjunto es desarrollado por el niño, lo cual es muy importante para sus relaciones sociales y afectivas
La lectura en los niños sordos asociada a esta técnica no ha sido del todo probada, pero se cree que la experiencia en adultos sordos podría ser trasladada a los niños tanto en las escuelas como en el entorno familiar con excelentes resultados.