Hemos escuchado en casa, en conversaciones o en la tele quizá, cuán importante es practicar algún deporte desde la infancia. Pues bien, la escuela es el mejor lugar para empezar. Sus beneficios se extienden sobre la salud, el desarrollo físico y también social
Desde el propio deporte los niños aprenden reglas básicas, que en su vida adulta serán puestas en práctica cuando se ejerciten. El calentamiento es una norma principal antes de emprender cualquier tipo de ejercicio, asimismo conocer la intensidad requerida para cada disciplina
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El hábito por los deportes crea niños más ordenados, disciplinados y seguros
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Promueve el contacto con otros pequeños a través del trabajo en equipo y por lo tanto las relaciones sociales se enriquecen
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Mientras los niños interactúan los valores adquieren significado: el respeto y la solidaridad son algunos ejemplos
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El deporte hace niños más saludables, los libra del sedentarismo y en la adolescencia es más beneficioso porque el desarrollo físico es intenso.