La discapacidad motora se produce en los niños debido a 3 causas principales. Pueden ser congénitas, relacionadas a su nacimiento o enfermedades o situaciones vividas durante su infancia.
Cuando aún está en el vientre materno, los problemas físicos asociados a la madre influyen en el desarrollo del bebé. Si la gestante enfermó de rubeola, no se alimentó lo suficiente, consumió drogas o alcohol y muestra incompatibilidad del factor Rh, el pequeño en formación tiene posibilidades de nacer con alguna anormalidad.
Los partos prematuros, el uso de forceps y un parto prolongado, también son consideradas como causas de la discapacidad motora.
Asimismo, en los primeros meses del bebé, los accidentes domésticos que ocasionaron fuertes traumatismos cerebrales, sufrir de envenenamiento con plomo, la falta de oxigenación e infecciones acompañadas de altas fiebres (meningitis) podrían ocasionar alguna discapacidad física o mental.