El uso de los aparatos de ortodoncia suele ser prolongado debido a que el movimiento de los dientes y huesos debe ser suave, pausado y lento. No se puede predecir con exactitud el tiempo que deben ser usados ya que éste variará dependiendo de:
- La gravedad del problema con los dientes.
- La edad del individuo.
- Los aparatos utilizados.
- La cooperación del paciente.
- En especial de la competencia profesional de quien lo realiza.
Incluso hay tratamientos que se realizan en varias fases separadas. Un tiempo deseable para un tratamiento de ortodoncia puede tomar por lo general dos años y en hoy en día con las nuevas tecnologías, ese tiempo se puede ver acortado a un año.
Es necesario advertir que una vez retirados los aparatos de ortodoncia, siempre existe una tendencia natural a la recaída en las nuevas posiciones de los dientes y huesos. Para evitar este riesgo, el paciente debe continuar usando unos sencillos dispositivos, llamados retenedores, por un periodo de tiempo que puede alargarse hasta la salida de las muelas del juicio.