La personalidad es proyectada durante la infancia a través de ciertas conductas. Veamos las características de los niños optimistas, pesimistas o irritables
Aquellos pequeños optimistas tienen la risa a flor de labios, lo cual les ayuda a manejar las dificultades con humor. Son realistas, se centran en lo importante y mantienen la calma frente a los problemas
Los niños pesimistas muestran este comportamiento por 3 razones: aprendieron a ver el lado negativo de la vida, fueron educados en un ambiente muy exigente, o son pequeños manipuladores que buscan llamar la atención mostrando una actitud desesperanzadora
En otro extremo están los gruñones e irritables, ellos esconden su inseguridad en una apariencia rebelde y ofensiva. Marcan su distancia frente al resto para no enfrentar los problemas, prefieren dar un grito cuando algo no se hace a su manera, antes que confrontar la situación dialogando