Probablemente tu bebe necesite llevar siempre bajo el brazo una mantita, un peluche o cualquier otro juguete que le recuerde la presencia de sus padres. Solo con el objeto elegido él se sentirá seguro, amado y cuidado mientras te encuentres fuera del hogar.
Los niños desarrollan esta necesidad entre los 9 y 12 meses. El aroma de casa impregnado en una manta siempre es bien recibida para la hora del descanso. Calma sus angustias cuando sale de casa y se siente protegido mientras se relaciona por primera vez con personas desconocidas.
El objeto de consuelo significa mucho para su bebé. De cierta manera acepta estar separado de sus padres pero encuentra consuelo en algo que los represente, algo similar a lo experimentado con las fotografías.
Si tu bebé tiene el hábito de dormir con su peluche y es casi imposible separarlos, despreocúpate, es un comportamiento perfectamente que perdura más o menos hasta los 3 años de edad.