Los bebes prematuros que nacen a las 32 semanas de embarazo o antes están más propensos a desarrollar problemas visuales, que los bebés que nacen a los nueve meses; por eso es común en ellos la retinopatía de la Premadurez, una enfermedad de los ojos.
La inmadurez y la lesión se presentan en el tejido de la cornea del ojo. El crecimiento exagerado de las venas del ojo y las hemorragias en la retina, originan cicatrices en la misma que pueden provocar una visión borrosa o inclusive la ceguera.
El tratamiento es conservador y la evolución suele ser buena en la mayoría de los pequeños. Si queda algún tipo de lesión y para que no se extienda, se aplican técnicas, como el láser y la crioterapia, para aislar zonas sin lesión en la retina.
Si tu bebé tiene este problema lo más conveniente es llevarlo con su médico; recuerda que la visión está íntimamente ligado a otras funciones como el lenguaje, la audición, la coordinación motora y el equilibrio. La visión influye en el desarrollo físico y en todo el proceso educativo de tu pequeño.