Cuando se trata de palabras o frases con sonidos similares, la pronunciación puede afectar nuestra pronunciación. Y los niños al no ser corregidos continúan expresándose erróneamente.
Según la edad de casa niño, elige los trabalenguas que más le gusten. Recuerda que este recurso, además de ayudarlo en su lenguaje, cumplirá con el objetivo de entretenerlo y divertirlo con cada equivocación.
La idea es que el niño además de mejorar en su pronunciación entienda el significado de los refranes. Recita el trabalengua primero, si te confundes mucho mejor para que el peque se anime. Luego, escucha cómo lo dice tu hijo, y aguarda hasta que lo diga completo, sin fallar una sola vez. Es solo cuestión de práctica.