La lactancia, aunque muchas veces se haya pensado lo contrario, no actúa como método anticonceptivo en el posparto. Puede ocurrir que los ciclos de ovulación se reinicien antes de que ésta concluya y la mujer pueda volver a quedar embarazada mientras aún amamanta a su bebé recién nacido.
Cuando el recién nacido es amamantado reduce a través de este acto la producción de las hormonas indicadas para la ovulación. En ese sentido la mujer queda expuesta a una infertilidad natural conocida como método de amenorrea de la lactancia.
Considerando que un porcentaje de mamás se vuelven a quedar embarazadas antes de concluir la lactancia, es mejor que utilices anticonceptivos mientras amamantas a tu bebé. Consulta a tu médico para saber cuáles son los más indicado durante este periodo, ya que algunos podrían ocasionarte problemas. Los estrógenos, por ejemplo, forman parte de ciertos métodos de protección y podrían traer consecuencias en el desarrollo de tu pequeño como el descenso de los testículos o en tu propia salud a través hemorragias vaginales.