La conversación con el logopeda necesita ser lo más sencilla posible. Sin duda aquella terminología técnica necesita ser excluida de la entrevista en vista que los padres del niño no podrán comprenderla.
- Es recomendable iniciar con las preguntas de rigor: ¿Qué sabe sobre la enfermedad de su hijo? ¿Desde cuándo tiene el diagnóstico? ¿Cómo se lo dijeron?
- En ciertos casos se solicita la presencia de otros profesionales, entre ellos: psicólogos, psicopedagogos y terapeutas.
- El exceso de definiciones, teorías, metodologías o modelos de planteamiento son evitadas en el diálogo.
- Utilizan material fotográfico, videos, revistas o esquemas con mayor información. Las experiencias de otras familias también son un gran aporte.
Los logopedas aconsejan:
- Anotar todas las dudas para que en las siguientes sesiones puedan ser conversadas tal vez con otros profesiones entendimos en el tema.
- Un ambiente cordial donde las culpas pasen a un segundo plano.
- Tener claro cuáles serán los días de las próximas reuniones.