El primer año que nuestro hijo asista a la guardería, básicamente trabajarán para mantenerlo distraído, junto a sus compañeros, para que coma y duerma, si es que pagamos por ello, y para que se divierta poniendo en prácticas ejercicios nuevos que le permitirán sobretodo desarrollar su aparato psicomotor. Conforme van haciéndose más mayores y van avanzando de curso, a nuestros hijos se les van exigiendo nuevos conocimientos. Nosotros también deberemos ayudarles en esa tarea que supone el camino de la escolarización.
- Aprenderemos a escuchar a nuestro sobre las nuevas materias que está aprendiendo en la guardería y, más especialmente, cuando empiece el colegio.
- Intentaremos sacar tiempo para ayudarle con el trabajo que deba realizar en casa: estar con él cuando haga los deberes.
- Deberemos organizarnos el padre y la madre para ajustar nuestros horarios de trabajo a las entradas y salidas del niño del colegio, si ningún otro familiar o persona de confianza puede hacerse cargo de ello.
- Trataremos de establecer un horario y unas rutinas para que nuestro hijo cumpla en casa, al llegar del colegio. Por ejemplo, merendar sano y a una hora lógica para que vuelva a sentir hambre hacia la hora de la cena, ponerse a hacer los deberes al acabar de merendar y dedicar otro ratito, al terminar a jugar, etc. No importa si una cosa la hace antes que otra, siempre y cuando, todo el trabajo que le exigen en el colegio lo tenga preparado antes de cenar, pero sí deberemos inculcarle esta idea: «primero las obligaciones y después las distracciones».
- Cuando el niño prepare una actividad en el colegio, como una función de teatro, una audición o siemplemente una celebración con motivo de las fiestas navideñas o el final del curso, será fundamental para la propia autoestima de nuestro hijo que nos interesemos desde el principio por sus ensayos y preparativos, que le preguntemos y que, delante de él, hablemos los planes de ese día para poder llegar a tiempo desde el trabajo para verlo. Además, es importante que asistan tanto el padre como la madre, así como los abuelos, si fuera posible.