Las populares mochilas escolares son una de los complementos más importantes de los niños y adolescentes. Los hay de todos los diseños y de todo precio; pero muchas veces se ignora cuál es la mejor manera de llevarla.
Seguro que has observado más de una vez la dificultad con la que se desplaza un niño debido al peso de su mochila. Según la Asociación Española de Productos para la Infancia (Asepri), un niño debería llevar sobre sus espaldas un 10 o 15 por ciento, respecto al peso coporal del menor. Estas indicaciones aveces se creen exageradas y son ignoradas por el pequeño y también por sus padres.
Las mochilas escolares deben ser anatómicas, de respaldo acolchado, correas anchas y de tamaño proporcional respecto a la talla del niño. Debe llevarse pegada a la espalda, a unos 5 centímetros por encima de la cintura.
La fundación Kovacs propone dividir los libros en volúmenes o cambiarse a una mochila de ruedas. Otras recomendaciones son incentivar al peque a realizar algún tipo de de ejercicio para fortalecer la columna vertebral.