Se origina por un virus del grupo herpes llamado varicela zóster, que provoca una erupción particular, acompañada de fuerte picazón, que se manifiesta con manchas pequeñas agrupadas, planas o con relieve, ampollas con líquido y costras y fiebre.
La varicela en niños se transmite rápidamente, pero las complicaciones severas vinculadas a ella son infrecuentes en los pequeños con defensas normales (inmunocompetentes) y usualmente no representa una amenaza para la vida de los niños sanos, la enfermedad es más peligrosa en los lactantes, en los pacientes inmunocomprometidos y en los adultos.
Cuando a un adolescente o a un adulto se contagia de varicela, el curso de la enfermedad será más largo y más severo y puede desarrollar una neumonía, incluso algunas personas tienen la varicela dos veces. La complicación más común de la varicela es la infección de la piel por bacterias. También se puede complicar con encefalitis o neumonía viral o bacteriana.
Si quieres prevenir el contagio de esta enfermedad en tu niño, recuerda que la vacuna contra la varicela debe ser aplicada según el calendario de vacunación.