Para prevenir el escorbuto en tu niño tiene que llevar una alimentación adecuada, que incluya el consumo de alimentos ricos en vitamina C, como naranjas, limón, lima, toronja, mandarina y frutas en general; por supuesto sin dejar de lado las verduras y hortalizas crudas como tomates, papas, pimientos, col, etc.
Además, durante los primeros meses de vida tienes que darle solo leche materna. Esta leche es pura y fresca, y contiene, en proporciones correctas, la mayoría de los nutrientes necesarios para el crecimiento y desarrollo del bebé.
A partir del año, incluye en la dieta de tu niño jugos de frutas y verduras, así como leche y pan integral. Cuando tu niño ya cumpla dos años puedes poner mayor énfasis en las frutas, vegetales al vapor, cereales enteros y leche.
Recuerda que una dieta bien balanceada juega un rol importante en la prevención del escorbuto en los niños.
Tu niño tiene que ingerir alimentos ricos en vitamina C, pero esto no quiere decir que tiene que consumir en exceso. El requerimiento diario de esta vitamina está entre 10-20gm.