La mayor parte de los problemas de audición que pueden tener los bebés se presentan justo después del nacimiento, por ello, una de las pruebas rutinarias que se les practican a los niños tras el parto es la prueba del oído. Pero, ¿qué pasa si tu bebé no supera la prueba del oído nada más nacer? Descubre la respuesta a continuación.
Las pruebas para detectar la sordera en recién nacidos
Existen dos pruebas para detectar la sordera en los bebés nada más nacer. Esto supone un gran avance, porque hasta hace algunos años, la sordera en los niños sólo se podía detectar a partir de los dos años de edad.
La Asociación Española de Pediatría recomienda que se realice a todos los recién nacidos una prueba de cribado neonatal para la detección precoz de la hipoacusia congénita o, lo que es lo mismo, la sordera en el bebé.
Hay que destacar que la mayor parte de las sorderas infantiles están presentes al nacer, por lo que se pueden detectar con estas pruebas. Sin embargo, en ocasiones, la sordera infantil se puede poner de manifiesto más tarde, lo que significa que un bebé que haya pasado la prueba al nacer no le exime de desarrollar sordera más adelante.
Por el contrario, si tu bebé recién nacido no ha pasado la prueba del oído, tu hijo será controlado periódicamente por médicos especialistas en otorrinolaringología, que son los que confirmarán o descartarán una posible sordera en el bebé.
En cualquier caso, los padres siempre deben estar alerta por si aparecen signos de sordera en el bebé durante los tres primeros años de vida. Hay que tener en cuenta que aproximadamente 5 de cada 1.000 niños en España nacen con algún tipo de sordera, y 1 de cada 1.000 padece una sordera profunda.
