La obesidad infantil es una enfermedad crónica multifactorial que depende en un 60% aproximadamente de factores de tipo ambiental. Entre ellos, destaca una dieta adecuada. Una alimentación infantil saludable y equilibrada es una premisa básica para prevenir la obesidad en niños.
Proporcionarle a tu hijo una dieta sana para niños puede conseguirse tomando como referencia la pirámide alimenticia. Esto implica que la base se la alimentación debe estar compuesta por alimentos ricos en hidratos de carbono, con lo que se consigue una nutrición infantil adecuada: cereales y sus derivados, patatas y legumbres. A medida que se avanza en la pirámide, van apareciendo aquellos alimentos que deberás darle en menor cantidad a tu hijo o prepararle sólo ocasionalmente.
El siguiente gráfico recoge las cantidades de cada alimento que deben tomarse: