Tras la alegría inmensa de tener a vuestro pequeño en el mundo, llega el momento de hacer una serie de trámites para inscribir al bebé muy importantes, entre ellos realizar la inscripción del nacimiento en el Registro Civil correspondiente. Aquí tienes toda la información sobre en qué consiste el registro de nacimiento y cómo hacerlo correctamente.
¿En qué consiste la inscripción de nacimiento?
Tanto si se trata del nacimiento de un bebé como en el caso de una adopción, ambos hechos deben figurar en el Registro Civil de tu ciudad. Ten en cuenta que aunque el momento del alumbramiento ya supone una serie de efectos civiles, estos no adquieren pleno reconocimiento hasta la necesaria inscripción del bebé tras nacer.
Desde el año 2015, este trámite puede realizarse en España directamente desde el propio hospital donde haya nacido el pequeño, pero no en todos los casos. Depende del sistema informático y de la disponibilidad y conexión entre la clínica y el registro. El centro sanitario dispone de 72 horas para comunicar el nacimiento al registro. Si puedes hacer el “papeleo” para registrar al bebé sin tener que moverte del hospital ¡mucho mejor! Sin embargo, en otros países es posible que los papás tengan que desplazarse hasta la oficina pertinente para firmar el acta de nacimiento y registrar al bebé en persona.
¿Cómo registrar al bebé?
Si tenéis que registrar el nacimiento del bebé vosotros mismos, no os preocupéis, no es una gestión complicada. El trámite para registrar al bebé lo puede realizar no solo el recién estrenado papá, sino cualquier otro miembro de la familia. La inscripción del bebé puede hacerse transcurridas 24 horas del nacimiento y tienes de plazo los 10 días posteriores al mismo. En casos excepcionales, con la debida justificación, es posible extender este plazo hasta los 30 días.
Debéis inscribir al bebé en el registro correspondiente al lugar del nacimiento, pero si por cualquier circunstancia, vuestro hijo ha llegado lejos de vuestro hogar (tal vez de manera inesperada) podéis inscribirlo en el registro correspondiente a vuestro domicilio con un certificado de empadronamiento y el alta del hospital, antes de disfrutar de los primeros días del bebé en casa con la familia.
La inscripción de nacimiento supone aportar una serie de datos básicos. Si vais al registro, debéis llevar algunos documentos básicos para registrar al recién nacido: el parte médico del hospital, que confirma el alumbramiento, además del necesario documento identificativo (DNI) y el libro de familia en caso de estar casados.
En el registro del bebé quedará constancia de la fecha, hora y lugar de nacimiento. También quedará reflejado el sexo del bebé y su nombre junto al de sus progenitores.
¿Por qué es importante el certificado del nacimiento?
Además de dejar constancia del hecho del nacimiento y certificar así la existencia de una persona con todos sus derechos como tal, inscribir a tu hijo en el registro es importante porque es el paso previo para poder realizar dos trámites más para registrar al bebé, igual de relevantes:
- Alta del bebé en la Seguridad Social (en España): Inscribir al pequeño como beneficiario en el sistema de la Seguridad Social es fundamental para que tenga acceso, entre otras cosas, a la asistencia sanitaria pública. Debéis darle de alta incluyéndolo como beneficiario en alguna de vuestras “cartillas”. Para realizar este trámite, es necesario que alguno de los padres tenga un número de afiliación a la Seguridad Social. Además, es imprescindible aportar el certificado literal de nacimiento del Registro Civil. En muchos casos la gestión ya puede hacerse de manera muy sencilla por internet. Para mayor información podéis dirigiros al cualquier Centro de Atención e Información de la Seguridad Social (CAISS).
- Solicitud de la tarjeta sanitaria. Una vez realizados estos trámites administrativos, en el centro de salud podéis solicitar la tarjeta sanitaria del bebé. En ese momento, se le asignará su pediatra, quien se encargará de las primeras revisiones del pequeño.
Cada vez son más las clínicas y hospitales que se encargan de realizar directamente el “papeleo” evitando los desplazamientos al registro para hacer la inscripción del nacimiento, pero recuerda confirmarlo cuando tengas a tu pequeño en brazos y seáis los papás más felices del mundo.