A muchas madres les preocupa no tener suficiente leche en los instantes previos a ofrecer el pecho al bebé, sobre todo cuando el pequeño muestra esos primeros síntomas de que su apetito se está despertando. Para evitar la incertidumbre de saber si un seno está vacío o tiene suficiente leche para el bebé, sería ideal conocer cuál es el tiempo mínimo que tarda en llenarse el seno materno para que esté listo para el amamantamiento.
Esto no funciona así. No hay tiempos mínimos o máximos. La lactancia materna, en este sentido, es todo un maravilloso misterio. La conexión madre – hijo es tan perfecta, que tu cuerpo producirá la leche que tu bebé necesite y, ¡descuida! la tendrá preparada para cuando él la demande.
Tras el parto, la primera “subida” de la leche puede producirse en cualquier momento trascurridas 24, 48 o 72 horas. Cuanto antes des el pecho a tu hijo, antes acudirá tu leche a proporcionarle el mejor de los alimentos. Lo mismo ocurrirá en los meses sucesivos. Cuanto más coma tu hijo, más cantidad de leche producirás y menos tiempo tardarán tus senos en estar llenos. ¿Una hora, dos horas, tres…? Imposible determinarlo.
¿Cuánto tarda en llenarse el seno materno después de amamantar?
La mejor fórmula para saber el tiempo que tardan los senos en llenarse de leche después de las tomas y de tener tus pechos llenos de leche disponible para el bebé es la lactancia a demanda. Es un error prolongar el espacio entre tomas entendiendo que así tendrás más leche. Es justo lo contrario. Si tu hijo mama cada dos horas, tus senos estarán llenos en ese tiempo, aunque a ti te parezca que no es así (fíate de la Naturaleza). Si esperas una hora más, pensando que prolongando el tiempo entre tomas tendrás más leche, no solo conseguirás que el pequeño pase un mal rato, sino, además, que tu cuerpo produzca menos leche y que tus pechos tarden más en llenarse.