Para tratar la varicela en niños, debes asearlo constantemente por medio de baños tibios para mantener limpia su piel. El pequeño puede tomar baños de inmersión con bicarbonato de soda o avena diluido en una cantidad equivalente a 1 ó 2 tazas, estos remedios caseros son efectivos para aliviar la comezón. El agua atemperada , además, es buena para limpiar las heridas causadas al rascarse la piel.
Recorta y limpia bien las uñas del niño para evitar lesiones de rascado e infecciones. Si es necesario cubre sus manos con guantes de algodón para impedir que pueda lastimarse.
Trata de que tu bebé pase la mayor parte del tiempo sin pañales para que se sienta más cómodo o vístelo con ropa de algodón para evitar que la piel se irrite más. También, puedes usar talco mentolado, cremas o lociones antipruriginosas que ayudarán a disminuir la intensa picazón que producen las ampollas, pero si estas aparecen debes hacer que beba líquido en abundancia e ingiera únicamente alimentos blandos.
Como parte del tratamiento , el niño con varicela no debe exponerse al sol ni a la humedad. Cuida a tu hijo durante todo el proceso de la enfermedad ya que puede presentar complicaciones peligrosas, como la sobreinfección bacteriana de las heridas que requieren medicación con antibióticos. Además, otras complicaciones pueden ser otitis, laringitis, lesiones en la cornea, etc.
Prevención, vacunas, síntomas y causas de la varicela:
La vacuna contra la varicela es necesaria para niños de un año que aún no han sido contagiados, igualmente, es recomendada para niños mayores y adultos que no hayan tenido la enfermedad.
¿Cómo detectar síntomas de varicela en niños? Lee nuestro artículo.
¿Cuáles son las causas de varicela principales en los niños? Más información pinchando sobre el enlace