A partir de los 9 meses, es aconsejable que comiences a introducir pescado en la dieta del bebé. Los niños suelen aceptar bien este alimento por su textura, aunque quizá al principio le cueste acostumbrarse a su sabor.
Debes introducir el pescado en la dieta del bebé triturado y en pequeñas cantidades que irás aumentando poco a poco. Te recomendamos comenzar con los pescados menos grasos, como lenguado, merluza o pescadilla, para pasar después al pescado azul.
Si tu hijo rechaza el pescado, puedes tratar de camuflarlo con otros alimentos, aunque no es buena idea esconder el pescado por sistema. Prueba a ofrecérselo solo de vez en cuando, para que se acostumbre a su sabor y acabe aceptándolo como un alimento más de su dieta. Recuerda que los hábitos alimentarios saludables hay que adquirirlos desde pequeños.
Enseña a comer a los niños y conseguirás que tengan una dieta equilibrada a lo largo de su desarrollo evolutivo.
