Las dudas a la hora de acostar a un bebé son muchas. Hay varias posturas, y si no tenemos información, lo cierto es que tenderíamos a pensar que la más adecuada es boca abajo, algo que, como veremos, no es lo más recomendable. Te damos respuesta a la pregunta más típica en estos casos: ¿cómo debo acostar a un recién nacido después de comer? Descubre la respuesta a continuación.
¿Cuál es la mejor postura para acostar al bebé después de las tomas?
Como comentábamos, acostar boca abajo al bebé no es lo más recomendable. Se recomienda únicamente en horas de siesta muy cortas, siempre que estén supervisados; y es que hay estudios que aseguran que esta posición está relacionada con problemas fatales como la muerte súbita.
La mejor de las posturas para acostar a un bebé, ya sea después de comer, por la noche o a cualquier hora, es la posición decúbito supino. Esta postura es, para que nos entendamos, cuando el bebé está boca arriba. Los estudios son suficientes y aseguran que es la más adecuada y segura para el recién nacido.
En caso de que el recién nacido sufra algún reflujo gástrico, algo bastante normal en los lactantes, algunos médicos recomiendan que el colchón que se use (siempre firme) tenga una inclinación de unos 45 grados. De esta forma, se evitará problemas y complicaciones con el bebé durante las horas que esté durmiendo.
Otra posición es la posición decúbito dorsal. En ella, el bebé se coloca de lado. Muchas madres creen que es la más segura y cómoda para el recién nacido. No obstante, hay que tener en cuenta que en esta postura es mucho más sencillo que el bebé se de la vuelta solo, pudiendo terminar boca arriba o boca abajo indistintamente. Como siempre, lo mejor es vigilar al bebé para que la postura sea cómoda y evitar asfixias.
