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¿Por qué amamantar da hambre?

¿Por qué amamantar da hambre? 25 octubre, 2017Deja un comentario
Hambre durante la lactancia materna

¿Has empezado a dar el pecho a tu bebé y tienes más apetito? Especialmente durante las primeras semanas de lactancia es muy normal tener más apetito. El cuerpo demanda más alimento y muchas mujeres se preocupan ante la posibilidad de aumentar de peso cuando, en realidad, el deseo generalizado es el de perder algún kilo demás ganado durante los meses de embarazo.

Los expertos nutricionistas señalan que una madre lactante necesita un 20% más de calorías que una mujer que no esté dando el pecho a su hijo.

No debes preocuparte por tener más hambre durante la lactancia. Siempre que te cuides y te alimentes bien, siguiendo una dieta variada y saludable, no engordarás y tu bebé podrá disfrutar de todos los beneficios de la lactancia materna.

Producir la leche y amamantar a tu bebé supone un importante gasto de energía, por lo que es absolutamente normal que tu organismo reclame un mayor aporte calórico. Si sientes más hambre durante la lactancia, vamos a desvelarte las razones que explican este aumento del apetito en las mamás lactantes.

Motivos por los que aumenta el apetito durante la lactancia

Cada mujer es única y la sensación de hambre y sed durante la lactancia varía según los casos. Si al amamantar a tu bebé notas que necesitas una mayor cantidad de alimentos, come tranquilamente pero recuerda que el popular “hay que comer por dos” es un error. Frutas, verduras, hortalizas, carnes, pescados… Incrementa su presencia en tu dieta, pero no abuses de dulces y fritos con la excusa de que estás alimentando al bebé cada día.

Además del gasto calórico, los especialistas apuntan a que también la presencia de oxitocina durante la lactancia contribuye al incremento del apetito en la madre. Esta hormona, esencial para el embarazo y posterior lactancia, funciona como neurotransmisor proporcionando sensación de bienestar (tan importante a la hora de dar de mamar al pequeño) y contribuyendo, además, a despertar el apetito cuando das el pecho al bebé. La oxitocina favorece las digestiones ligeras y el aprovechamiento máximo de nutrientes en la mamá lactante. La naturaleza ha pensado en todo.

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