Los primeros viajes de tu bebé son emocionantes. Pero, sobre todo, viajar al extranjero con tu bebé. Suelen ser viajes mucho más largos, en los que no hay que dejar nada al azar. Desde el destino hasta la documentación. Intenta no olvidar nada. Te mostramos los 6 errores que no debes cometer si viajas al extranjero con tu bebé a continuación.
1. Elegir mal el destino
Viajar con un bebé es diferente. Nos guste o no. Si bien es cierto que no es un problema insalvable, hay cosas que debes tener en cuenta, como por ejemplo el destino. Por muy aventureros que seáis, es importante escoger zonas seguras. Países que estén en guerra o cercanos a puntos de conflicto no convienen. No sólo estos, también aquellos que puedan tener problemas por enfermedades epidémicas.
Nunca olvides que los bebés son viajeros de riesgo. Si decides escoger lugares y destinos exóticos, pregunta siempre antes a un pediatra. Sobre todo, con los niños pequeños, si viajas al extranjero con tu bebé, siempre será mejor optar por los destinos cómodos y cercanos. Destinos que sean interesantes para los padres pero que eviten los peligros innecesarios.
2. Si viajas al extranjero con tu bebé no visites al pediatra a última hora
Ten en cuenta que algunas vacunas y medicaciones específicas, necesitan un tiempo para su administración. Si tenéis planeadas las vacaciones con varios meses de antelación, pregunta antes al pediatra. Además, no te olvides de que sus vacunas rutinarias deben estar completamente actualizadas. Un niño que viaja al extranjero sin tener completa las pautas de su vacunación, estará más expuesto a posibles enfermedades.
3. No contratar un seguro médico
No contratar un seguro médico no es sólo un error para nosotros, también para nuestros hijos. Dentro de la Unión Europea puedes solicitar la tarjeta europea de seguro de enfermedad. Esta tarjeta cubre la asistencia médica durante una estancia temporal. No obstante, en muchos países sólo existe la asistencia en centros médicos privados, algo que puede ser costoso. Un seguro médico de viaje para niños, y también para adultos, no cuesta tanto como imaginas.
Además, también es buena idea ir cargados con un botiquín básico de primeros auxilios para el bebé. Un botiquín que tenga gasas estériles, algodón, esparadrapo, tiritas, agua oxigenada, alcohol, termómetro, tijeras, suero fisiológico, calmantes o antipiréticos. También pomadas para aliviar las picaduras de insectos, así como crema protectora para el sol.
4. No preparar toda la documentación
Todos los países dentro del territorio Schengen (Alemania, Austria, Bélgica, España, Francia, Holanda, Italia, Luxemburgo, Portugal, Dinamarca, Suecia y Finlandia), tan sólo exigen el libro de familia a la hora de viajar con niños. No obstante, es aconsejable llevar el DNI o pasaporte del pequeño, ya que se aconseja que el bebé viaje con su pasaporte. Asimismo, para otros países de la Unión Europea que no estén dentro de esta zona, es imprescindible que cada viajero, sin importar la edad, tenga su DNI o pasaporte.
Si además viajas fuera de Europa, el pasaporte será imprescindible, tanto en adultos como en niños. Además, en muchos países es necesario el visado en regla con bastante antelación. Cuando organices tus viajes, consulta siempre la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, con eso tendrás toda la información clara.
5. No pensar en el descanso del bebé
Aunque creas que tu hijo dormirá durante todo el trayecto, esto no es así, ya que el sueño del bebé se podría ver afectado por el estrés. En un avión, por ejemplo, la presurización de los oídos puede pasarle malas jugadas a tu hijo. Haz que use el chupete en el ascenso y descenso del avión para aliviarlo. Además, no te olvides de llevar siempre juguetes, lo mantendrás ocupado. A la hora de escoger asientos. Si quieres que tu hijo descanse mejor, reserva siempre los asientos centrales, que son los más centrales. Si están ocupados, decántate por los delanteros.
6. No preparar un buen equipaje de mano
Viajes en coche, en avión o en barco, el equipaje de mano siempre tiene que estar presente cuando viajas al extranjero con tu bebé. Esta pequeña mochila debe llevar de todo. Desde comida, toallitas, pañales o biberones, hasta juguetes y varios cambios de ropa. No olvides meter el botiquín aquí, para tenerlo siempre cerca.