Ser madre soltera no es un drama. Sí, puede que estés pasando un divorcio traumático, quizá el padre de tu hijo ha desaparecido y te toca enfrentarte a esta nueva etapa tu sola, o bien, hayas decidido ser mamá soltera por decisión propia. No obstante, no te lo cuestiones en ningún momento, podrás hacerlo sola. Ahora bien, la llegada de tu bebé conlleva una gran responsabilidad y tampoco será un camino de rosas. Criar a un hijo sola puede ser complicado. Por este motivo te presentamos la guía básica de supervivencia para la mamá soltera. Fíjate bien en estas claves y ponlas todas en práctica.
¿Qué debes hacer como madre soltera?
Además de considerar los consejos para ser madre soltera que te proponemos, te animamos a repasar este listado de recomendaciones para sobrevivir si eres madre soltera y disfrutar al máximo con tus hijos de esta experiencia:
Relacionarte con otras madres solteras
Los grupos de apoyo funcionan. También en esto de ser mamá soltera. Relacionarse con gente que está pasando por las mismas dificultades que tú siempre es bueno. Convivir con otras mamás solteras te ayudará a ver que las cosas tienen solución y a no sentirte sola en ningún momento.
En estos círculos de madres solteras podrás aprender tips, consejos para saber cómo salir de determinadas situaciones y te acompañarán cuando estés con el ánimo por los suelos. Te ayudarán, ante todo, a relativizar y ver que los problemas siempre pueden solucionarse. Ojo, esto no significa que tengas que alejarte del resto de amigos y familiares. Míralo como una manera de ampliar tu círculo y entrar en contacto con mamás que tienen muchas cosas en común contigo. Los miedos compartidos siempre son menos terroríficos.
Olvídate del pasado
No siempre tiene que ver con un divorcio, pero está claro que en muchas ocasiones (un gran porcentaje de ellas), criar a un hijo sola es el resultado del final de una relación amorosa. Ojo, no todos los padres se implican igual. Hay algunos que estarán al pie del cañón. Muchos otros, por desgracia, no. Los meses tras el divorcio o ruptura pueden ser dolorosos. No obstante, tienes que tener en cuenta que tu futuro está con tu hijo (o con tus hijos), tanto su educación como su bienestar. Piensa también que ellos no tienen la culpa de vuestras decisiones, así, si el padre sigue presente, jamás hables mal a tus hijos de su padre.
Por mucho que te remueva sentimientos, tampoco evites ni pongas problemas a tu ex para visitar a sus hijos. Está en su derecho. Tus hijos estarán mejor, sin duda. Además, en muchas ocasiones, estas situaciones pueden terminar en juicios desagradables.
Acepta la ayuda de los demás
Vale, quieres demostrar que puedes hacerlo todo tú sola. No obstante, no eres infalible. Uno de los principales errores en las madres solteras es creer que pueden con todo. Posiblemente sea así, pero en momentos puntuales, la ayuda de terceros es necesaria. Aprende a delegar. Deja que tu madre, cualquier familiar o amigo, pueda ayudarte un día determinado. Míralo como una manera de encontrar momentos para relajarte. Al final, tienes que estar al 100% con tu hijo. Si no descansas, no lograrás estarlo.
Madre soltera, no envidies a las parejas
Debería ser una máxima que todas tuviéramos presente. Estar sola o ser madre soltera no implica tener que envidiar a todas las parejas. Si empiezas a albergar sentimientos de envidia hacia las parejas, poco a poco lo harás con tus familiares y amigos. Esto podría desembocar en una situación en la que te alejes de todos. La soledad nunca jamás es buena compañía.
Piensa que todos, hasta las parejas casadas, tienen sus problemas. La vida idílica de pareja feliz con hijos muchas veces no es más que un espejismo. Quizá esto te ayude, o pensar que es más sencillo dedicarte única y exclusivamente a una persona, tu bebé, que a una pareja y tu hijo.
Enfrenta las situaciones desde el optimismo
Los días malos vendrán, no lo dudes. Las situaciones de estrés, de agitación y de desesperación. No obstante, aprende a relajarte y a tener paciencia con el bebé. Mira los problemas con optimismo. Si te cierras en ti misma y ves sólo la parte negativa de las cosas, sólo conseguirás que tus hijos aprendan de esa negatividad.
En el caso de los padres divorciados, si tu hijo detecta tu frustración, asociará la misma a vivir separados. Tendrá la sensación de que su hogar está roto, algo que podría generar un conflicto interno en el niño, una falta de confianza y miedo absoluto a las relaciones de pareja.
Y, sobre todo, ¡disfruta de la experiencia de ser mamá!