Una de las mejores formas de iniciar a los niños en el consumo de frutas es a través de los zumos. Sin embargo, antes de empezar a darle zumos a tu bebé, debes preguntarle al pediatra sobre las frutas que puede tomar y desde que mes puedes empezar a ofrecérselas para completar su alimentación. Descubre todo lo que debes saber para preparar los primeros zumos del bebé, a continuación.
Consejos para introducir los zumos en la dieta del bebé
Las vitaminas constituyen uno de los pilares esenciales en la dieta de los niños, y especialmente, todas aquellas vitaminas que proceden de alimentos frescos como las frutas o las verduras. Los zumos son una buena alternativa para comenzar a introducir las frutas en la alimentación complementaria del bebé. Sin embargo, antes de comenzar a dárselos deberías consultar a tu pediatra sobre cuál es la edad óptima para que tu hijo empiece a tomar zumos de frutas.
Por norma general, los pediatras recomiendan introducir los zumos en la alimentación del bebé entre los 4 y los 6 meses de vida, especialmente si el niño tiene un tracto intestinal lento y como remedios natural para aliviar el estreñimiento infantil. Conoce más información sobre cómo introducir los zumos en la dieta del bebé a continuación:
- Los primeros zumos que se le ofrecen al bebé deben siempre estar exprimidos o licuados en casa a partir de frutas frescas y naturales, siendo los más recomendados los de naranja, pera, mandarina, piña, uva, manzana y ciruela.
- Asimismo, la forma de ofrecer el zumo a un bebé de seis meses debe ser, al principio, a través de una pequeña cucharita, ya que de esta forma el niño se acostumbrará progresivamente a tragarlo más deprisa.
- Los pediatras desaconsejan ofrecer el zumo a los niños en biberón, ya que de esta forma el niño produce más saliva y existe más riesgo de que el zumo permanezca más tiempo en la boca, dando lugar a caries y otros problemas bucodentales en el bebé.
- Otro consejo para prevenir las caries en los niños, además de evitar darle los zumos de frutas con el biberón, es también evitar que el bebé se duerma con el biberón en la boca o que pase muchas horas bebiendo de él a lo largo del día.
- Para empezar a introducir el zumo en la dieta de tu bebé, debes comenzar con media cucharadita de zumo el primer día, y progresivamente, ir aumentando la dosis hasta que consiga beber unos 50 mililitros de zumo de frutas al día.
- Muchos padres optan por reservar el zumo para la merienda, una vez que el bebé se ha despertado de la siesta, porque aseguran que a esta hora del día les suele apetecer más, aunque eso, por supuesto, ya dependerá del gusto de cada bebé.
¿Puedo dar zumo de naranja al bebé?
Si no sabes cuándo puede empezar a tomar zumo tu bebé, debes saber que uno de los zumos más recomendables para los bebés a partir de los cuatro meses es el de naranja, ya que les aporta una gran cantidad de vitaminas y de fibra que les ayuda, a su vez, a favorecer el tránsito intestinal. Sin embargo, para conseguir que a tu bebé le guste el zumo de naranja desde el principio, procura exprimir siempre naranjas de mesa, pues éstas tienen un sabor más dulce. También debes colarlo muy bien, no añadirle azúcar, ni tampoco rebajarlo con agua.
Existen múltiples mitos sobre las vitaminas en la alimentación infantil, y uno de ellos es, precisamente, que el zumo de naranja hay que tomarlo nada más exprimirlo para que no pierda las vitaminas.
Sin embargo, aunque se ha demostrado que se puede esperar hasta doce horas para tomar el zumo de naranja antes de que pierda las vitaminas, es conveniente que se lo ofrezcas a tu bebé nada más exprimirlo, ya que al esperar mucho tiempo el zumo se oxida y suele cambiar sustancialmente su sabor.
