El destete es uno de los procesos naturales que está dentro del desarrollo de los niños y que, tarde o temprano, siempre llegará. Algunas madres deciden dejar de darle el pecho a sus bebés poco a poco, y otras, en cambio prefieren esperar a que sea el niño quien deje de mamar por sí solo. ¿Quieres dejar de amamantar a tu bebé? Descubre 5 consejos para el destete gradual, a continuación.
Tips para poner fin a la lactancia materna
Porque te incorporas a trabajar y pasarás muchas horas fuera de casa, porque el niño ya no quiere seguir mamando o, simplemente, porque consideras que la lactancia materna ha tocado su fin. Sea cual sea el motivo por que el que la lactancia materna ha llegado a su fin, debes tener en cuenta una serie de consejos para que este proceso sea lo más natural y respetuoso posible para tu bebé.
Los expertos recomiendan que los bebés tomen leche materna hasta, al menos, los dos años de edad. Pero en muchos casos el destete se produce antes, y tanto la madre como el bebé deben saber cómo llevar el proceso. Una vez conozcas las señales que indican que el bebé está preparado para el destete, te aconsejamos que leas estas recomendaciones para dejar de amamantar con facilidad:
1. Busca toda la información
Si la decisión de empezar a destetar al bebé parte de la madre porque, por ejemplo, existe algún motivo médico que le impida seguir dando el pecho a su bebé, el principal consejo que debe seguir la madre en estos casos es informarse bien.
Y es que, son pocas las circunstancias médicas o los medicamentos que son incompatibles con la lactancia materna. Por ello, no estaría de más que preguntaras al médico si puedes o no continuar con la lactancia materna antes de tomar la decisión de abandonarla por tu cuenta.
2. Mejor de mutuo acuerdo
Cuando el destete no se produce de manera forzosa si no que es voluntario, porque surge como una iniciativa de la madre o del niño, lo ideal es que esta situación se produzca de mutuo acuerdo entre ambos.
En este sentido, sea cual sea el momento en el que madre o hijo deciden ponerle fin al destete, conviene respetar esta opción personal de cada uno de ellos.
3. Un proceso gradual
Si el destete es una iniciativa de la madre, el principal consejo a seguir en este caso es procurar que este proceso sea gradual, evitando así un destete brusco que se produzca de un día para otro.
De hecho, un destete brusco puede causar problemas a la madre como la ingurgitación mamaria, obstrucciones, mastitis o abscesos en las mamas. Por ello, es mejor ir suprimiendo alguna toma de pecho al día, y poco a poco, ir reduciéndolas hasta que el bebé deje de mamar por completo.
Hay que tener en cuenta que en cuanto el bebé empieza a succionar menos, la cantidad de leche que produce la madre también disminuye, hasta que llegará un día en el que la leche desaparecerá por completo. Además de tener grandes beneficios para la madre, cuando el destete se produce de manera gradual, el niño también lo llevará mucho mejor desde un punto de vista emocional.
4. No ofrecer pero tampoco rechazar
Muchos pediatras recomiendan que esta es la forma menos traumática de que el bebé deje la lactancia materna. Se trata, básicamente de no ofrecer el pecho al niño, pero en caso de que éste lo reclame en algún momento, no rechazárselo tampoco.
5. Recurrir a distracciones
Algunas madres también emplean el método de la distracción para conseguir poco a poco el destete de sus hijos, sobre todo cuando se trata del destete nocturno. En este caso, lo único que hay que hacer es identificar los momentos en los que el niño suele pedir el pecho, y anticipar alguna alternativa de distracción antes de que llegue este momento, para el que niño vuelque así su atención en otra cosa.